Interior y maletero del BMW X2

La parte delantera del habitáculo es calcada a la del nuevo X1, un modelo que nos parece amplio y práctico. Por la forma de la carrocería, el X2 tiene unas plazas traseras con un pelín menos de altura libre hasta el techo, pero no debería afectar de manera notable a la habitabilidad y, como su hermano el X1, creemos que es un coche adecuado para que dos adultos viajen atrás sin agobios. Nuestro veredicto tras subirnos a él es que mantiene el listón al nivel que en sus últimas creaciones nos tiene acostumbrados BMW: los acabados son mejores que en su competidor directo, el Mercedes-Benz GLC Coupe, en especial en aquellas zonas donde hay presencia de plásticos negros y superficies brillantes, donde BMW se preocupa más de rematar bien los bordes y hacer mejor los ajustes para que no se perciban crujidos ni fragilidad cuando se aprieta con la mano alguna pieza al azar.

La calidad de fabricación es idéntica a la del X1, algo que es una buena noticia, ya que nos parece que está por delante de la mayoría de su competencia en las marcas rivales. Los materiales son buenos, la ergonomía está bien conseguida y los ajustes están muy cuidados.

Multimedia

El BMW X2 tiene la configuración de doble pantalla que ya estrenó el X1, con una de 10,25 pulgadas para el salpicadero y otra de 10,7 para el sistema multimedia. Este último funciona mediante el sistema operativo más moderno de BMW, el Operating System 9 (el X1 lleva una versión anterior). Una diferencia es que este sistema permite jugar a videojuegos a través de la pantalla principal, como parte de una plataforma de suscripción de servicios digitales.

Como te puedes imaginar, este sistema está conectado a internet y ofrece compatibilidad completa con smartphones. El navegador integrado también es de serie, aunque no su función de realidad aumentada, que forma parte del paquete Innovation, así como la bandeja para la recarga inalámbrica de teléfonos. A mí, particularmente, no me gusta lo que ha hecho BMW con el sistema multimedia. Me parece farragoso de entender, pensado más para impresionar que para ser cien por cien práctico. Quizás con el uso continuado consiguiese acostumbrarme y obviar esos detalles pero, hasta ahora, es el sistema multimedia con el que más me ha costado encontrar las cosas que he probado en un BMW, donde para mí siempre había sido fácil gracias a la sencillez de todo en modelos anteriores.

El sistema de sonido puede tener hasta 12 altavoces (de la marca Harman Kardon).

El maletero también ha crecido de manera muy notable respecto al X2 de generación anterior. Ahora, dependiendo de la versión, tenemos entre 515 y 560 litros de capacidad, un volumen muy similar a lo que ofrece un BMW X3, por ejemplo, que es un coche de categoría superior.

El maletero más pequeño lo tiene la versión de gasolina de 170 caballos, ya que su sistema de hibridación ligera se lleva parte del espacio de carga disponible. Tanto el Diesel de 150 como la versión deportiva de 300 caballos, tienen 560 litros de maletero. Los iX2, por su parte, se quedan en un término medio, con 525 litros.