Interior y maletero del Honda Jazz

Solo tenemos buenas palabras para describir la amplitud interior del Jazz. Es un coche al que resulta particularmente sencillo entrar y salir porque los asientos van altos y quedan cerca de las puertas. Además, el espacio para los pasajeros de las plazas posteriores es muy bueno, con mucho hueco para las piernas y mucha altura hasta el techo. No es suficientemente ancho para que tres personas vayan a gusto atrás, pero tampoco lo son sus rivales. 

En definitiva, nos parece un coche pequeño que puede venir muy bien como segundo vehículo para una familia con hijos crecidos, o para personas con movilidad reducida que necesiten un coche cómodo. 

Como suele ser habitual en Honda, la calidad de los acabados deja buena impresión, no ya por los materiales, que son normalitos, sino porque todo parece ensamblado para aguantar bien el paso del tiempo.

Multimedia

El sistema multimedia del Jazz está conectado a internet y va asociado a una pantalla táctil de 9 pulgadas, tiene un navegador incluido de la marca Garmin y es compatible con Android Auto y Apple CarPlay. La instrumentación también es por pantalla, con dos indicadores a ambos lados para el nivel de combustible y de carga de la batería.

El equipo de sonido de serie incluye cuatro altavoces y hay cuatro tomas USB para recargar tus aparatos, dos delante y dos detrás. Algo que nos encanta es que, debajo de la pantalla, Honda mantiene una serie de botones y ruletas para manejar el sistema de climatización, huyendo así de la tendencia de incluir esos controles en la pantalla para abaratar costes. 

El maletero del Jazz tiene 304 litros de capacidad, que es un volumen intermedio para un coche de este tamaño. En general, el de los SUV similares, como el Yaris Cross o el Renault Captur es más grande, con 397 litros y 326 litros, respectivamente. No obstante, si lo comparamos con turismos como el Toyota Yaris o el Renault Clio, el Jazz sale ganando. 

Más allá del volumen, el maletero resulta muy aprovechable porque tiene formas regulares. Los respaldos de los asientos se pueden abatir para crear una mayor superficie de carga y quedan casi planos, con un pequeño escalón respecto a la superficie del maletero. Hasta aquí todo bastante normal, pero algo poco frecuente es que las bases de los asientos traseros se pueden levantar (sistema Magic Seat) y liberan un gran espacio tras los asientos delanteros, lo cual puede resultar muy útil si quieres transportar una bici o algún objeto alto, por ejemplo.