Precio y opinión del Toyota Proace Verso

El Toyota Proace Verso recibió novedades en 2024 que lo hacen aún más versátil y cómodo para todo tipo de usuarios. Esta furgoneta es en realidad fruto de una colaboración con Stellantis, que la fabrica a la par que sus modelos equivalentes de Peugeot (Traveller), Citroën (Spacetourer) y Opel (Vivaro).

Es una furgoneta que se adapta a lo que necesites, ya sea para trabajo, para tu familia o incluso para hacer de taxi ejecutivo si lo prefieres. Lo bueno de este modelo es que está disponible en dos tamaños: la variante de tamaño medio de 4,98 m y el largo de 5,3 m. Esto te da más flexibilidad para elegir el tamaño que mejor se adapte a tu día a día.

Una de las cosas que más destaca es la opción de hasta nueve plazas, así que si tienes una familia grande o te dedicas al transporte de pasajeros, tienes espacio para todos. Además, la Proace Verso tiene niveles de equipamiento que se adaptan a todas las necesidades: desde lo más práctico hasta algo más elegante para un uso ejecutivo.

Los motores disponibles para las versiones matriculables como turismo son dos, ambas con motor 2.0 diésel, uno con 144 caballos y cambio manual y otro con 177 CV y cambio automático.

En cuanto a la capacidad de carga, puedes cargar hasta 6,6 m³ si eliges la versión larga con el sistema Smart Cargo. También tiene una capacidad de carga útil de hasta 1.400 kg, lo que la convierte en una furgoneta súper eficiente para el trabajo. Y si necesitas remolcar algo, la Proace Verso puede tirar hasta 2.500 kg sin problema.

Otro detalle interesante es su altura de 1,9 metros, que te permite acceder a aparcamientos estándar, lo cual es bastante útil en ciudades con espacios de estacionamiento limitados. Además, tiene un radio de giro de 6,2 m en la versión media y de 6,4 m en la larga, así que moverla en zonas urbanas no es un problema.

Hay dos motores Diesel disponibles para el Toyota Proace Verso:

• Una versión de 2.0 litros con 144 caballos, cambio manual de seis relaciones y un consumo medio homologado de 7,5 l/100 km. Con este motor la velocidad máxima es de 180 km/h y la aceleración de 0 a 100 km/h, de 10.6 segundos.
• Una versión de 2.0 litros con 177 caballos, cambio automático de ocho relaciones y un consumo medio homologado de 7,4 l/10 km. Con este motor la velocidad máxima es de 185 km/h y la aceleración de 0 a 100 km/h, de 9,1 segundos.

Me gustaría poder decir que lo hace todo tan bien como cualquier Toyota, pero no es el caso. La Proace Verso deja muy claro que es una furgoneta desde que te subes. Y por si te quedan dudas, lo confirma cuando arrancas el motor diésel.

El motor básico, con sus 144 caballos, no lo mueve nada mal y da un consumo razonable. El cambio manual del Proace Verso te pone rápidamente en la piel de un repartidor de Amazon. Es bastante tosco y el motor, ruidoso para lo que se estila hoy en día, sobre todo si lo comparo con el de otras furgonetas del estilo, como la Ford Tourneo Custom o la Volkswagen Caravelle. Cualquiera de estas dos es más agradable de usar, silenciosa, cómoda y llevadera. Empezando porque el puesto de conducción se asemeja más al de un turismo y acabando porque todo funciona con más suavidad y refinamiento.

Ese es el principal defecto que le encuentro al Proace Verso: que me da la sensación de haberse quedado anticuada. La suspensión es un tanto seca, aunque es cierto que le da una estabilidad a prueba de bombas. El aislamiento del ruido aerodinámico es bastante pobre, y la forma de entregar la potencia del motor diésel recuerda a los motores de hace 15 o 20 años, sin progresividad, un poco al estilo "todo o nada", un tanto torpe cuando va a pocas revoluciones y con la potencia concentrada en un margen estrecho de revoluciones. Me cuesta recomendarla, sobre todo para uso familiar, porque hay modelos equivalentes de la competencia que tienen ya un nivel de confort que se acerca mucho más al de un turismo o un SUV.

Lo dicho, el Proace Verso no es el mejor Toyota que he probado. Pero claro, es que no la fabrica Toyota.

El Toyota Proace Verso 2024 es una furgoneta robusta y amplia, pero se nota que es un modelo de trabajo, no un vehículo familiar. El acabado básico resulta rudimentario, con un equipamiento obsoleto, aunque es adecuado para usos profesionales. La experiencia de conducción es algo tosca, con un motor ruidoso y una suspensión dura, lo que la hace menos cómoda que otros modelos de la competencia.