Más de 11.000 euros por reparar un motor eléctrico defectuoso. ¿Estamos locos?

En la línea de otros vídeos del canal de YouTube de carwow.es, JF Calero visita el taller de 80% Eléctrico para ahondar en los problemas recurrentes de algunos coches eléctricos, así como para denunciar las facturas disparatadas que emiten sus fabricantes una vez se agota la garantía oficial con el propósito de evitar que el cliente acceda a su reparación. En esta ocasión, la complicación se encuentra en los motores de algunos modelos de Hyundai y KIA: Kona, Niro, etc. ¿Tienen un defecto de fabricación?

Cuando se habla de fallos graves en automóviles eléctricos, normalmente se hace referencia a inconvenientes relacionados con sus baterías y los sistemas de gestión de estas, pero en este caso se trata de un problema que concierne al propulsor. Este error de funcionamiento consiste en que el rodamiento interior del rotor produce una serie de descompensaciones que terminan por afectar a la caja de transferencia, que es más frágil. Si sólo se cambia esta, no se ataca a la raíz de esta contrariedad y vuelve el fallo.

Como casi todo en el mundo de la mecánica, este es un fallo que tiene solución y la cual llega a ser gratuita mientras el vehículo sigue garantizado por la marca (esta suele sustituir las piezas afectadas y listo). El problema para el consumidor viene cuando esta reparación se repite más de una vez y, pasado un tiempo, el usuario tiene finalmente que hacer frente a los costes de un enésimo arreglo con unos importes absurdos cuando, fuera de Europa, el reemplazo de componentes es muchísimo más barato.

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