Precio y opinión del Suzuki S-Cross

El Suzuki S-Cross ha estado en el mercado desde 2013 y ha sido actualizado para seguir compitiendo con rivales más modernos. Anteriormente conocido como el SX4 S-Cross, ha transitado desde motores diésel y gasolina hacia versiones híbridas que le permiten mantenerse en línea con las tendencias actuales. Esto hace que a pesar de su longevidad, siga siendo una buena opción para aquellos que buscan un vehículo híbrido accesible, aunque su competencia, como el Hyundai Kona y el Mazda CX-30, ofrece más refinamiento y tecnología más avanzada. En cuanto a dimensiones, el S-Cross es más largo que el Ford Puma y el Skoda Kamiq, pero es menos ágil que el Puma y menos espacioso que el CX-30.

En cuanto a la mecánica, el S-Cross está disponible con dos opciones híbridas: una versión Mild Hybrid o microhíbrida con un motor de 129 CV y una Strong Hybrid o híbrida convencional con motor de gasolina de 1.5 litros de 116 CV . Ambas versiones pueden equiparse con tracción delantera o la opción de tracción total AllGrip en las versiones superiores, un punto diferenciador frente a competidores como el Ford Puma y el Skoda Kamiq, que solo ofrecen tracción delantera.

En tecnología, el S-Cross incluye una pantalla de infoentretenimiento de hasta 9 pulgadas en sus versiones más altas. Aunque es un avance, se queda atrás frente a rivales con sistemas más intuitivos y con gráficos más claros. Además, el cuadro de instrumentos no es totalmente digital, lo cual es una limitación comparado con otros SUV en el mercado. A pesar de estas desventajas, el modelo se destaca en conectividad con Apple CarPlay y Android Auto de serie en todas las versiones.

El Suzuki S-Cross está disponible en tres niveles de acabado: S1, S2 y S3. El acabado S1 es el más accesible y ofrece un equipamiento sólido, mientras que el S2 y el S3 añaden extras como asistentes a la conducción avanzados y pantallas más grandes. Además, los modelos Ultra incluyen tracción 4x4 AllGrip. La diferencia de precios es notable entre las versiones Mild Hybrid y Strong Hybrid, siendo estas últimas más caras pero más eficientes en términos de consumo y emisiones.

El Suzuki S-Cross cuenta con dos opciones híbridas: el Mild Hybrid con un motor 1.4 Boosterjet de 129 CV y 235 Nm de par y el Strong Hybrid con un motor 1.5 Dualjet de 102 CV, complementado por un motor eléctrico de 33 CV, cuya potencia máxima combinada es de 116 CV. El Mild Hybrid está disponible con una transmisión manual de 6 velocidades y puede equiparse con tracción delantera o total (AllGrip). Por su parte, el Strong Hybrid viene con una caja de cambios automática de 6 velocidades que no es tan refinada como otras del segmento.

Conducción

El manejo del Suzuki S-Cross es cómodo en la mayoría de las situaciones. Su suspensión suave permite absorber bien los baches en la ciudad, y en autopista es relativamente tranquilo, aunque el ruido de rodadura es más alto de lo deseado. El motor 1.4 Boosterjet proporciona una aceleración adecuada, aunque es necesario revolucionarlo bastante para alcanzar velocidades de autopista rápidamente. En contraste, el sistema híbrido del 1.5 es más lento y con menos respuesta, especialmente en cambios de marcha, lo que puede ser frustrante en situaciones de tráfico denso o al incorporarse a una carretera rápida.

Consumo y emisiones

El Suzuki S-Cross Mild Hybrid ofrece un consumo combinado de 5,4 l/100 km en la versión 4x2, mientras que el modelo 4x4 AllGrip sube a 5,6 l/100 km. La versión Strong Hybrid es la más eficiente, alcanzando hasta 5,1 l/100 km en su versión de tracción delantera. En términos de emisiones, el Mild Hybrid emite entre 118 y 121 g/km de CO2.

Aunque estos consumos son buenos, modelos como el Ford Puma ofrecen consumos similares con una mayor agilidad y una experiencia de conducción más deportiva. Sin embargo, el S-Cross se sitúa bien frente a rivales como el Hyundai Kona y el Skoda Kamiq, ambos con cifras de consumo similares.

Prestaciones

Las prestaciones del Suzuki S-Cross varían según el motor. La versión 1.4 Boosterjet Mild Hybrid es la más rápida de la gama, con una aceleración de 0 a 100 km/h en 9,5 segundos. Esta cifra es aceptable para el día a día, aunque queda por detrás de competidores como el Hyundai Tucson, que acelera en 8 segundos. La velocidad máxima de la versión Mild Hybrid es de 195 km/h, más que suficiente para el tipo de coche que es.

La versión 1.5 Strong Hybrid es más lenta, con un tiempo de 0 a 100 km/h de entre 12,7 y 13,5 segundos, dependiendo de si optas por la tracción 4x2 o 4x4. Aunque la eficiencia es su punto fuerte, las prestaciones del motor no son tan dinámicas, especialmente si buscas un coche con mayor agilidad en carretera.

Comparado con el Ford Puma y el Hyundai Kona, el S-Cross se queda por detrás en términos de aceleración.

Ayudas a la conducción

El Suzuki S-Cross incluye una buena cantidad de asistentes de conducción de serie en todas las versiones. El sistema Dual Sensor Brake Support (DSBS II) incluye soporte de frenada predictiva, con detección de peatones, bicicletas y motocicletas. Además, viene equipado con Alerta de cambio de carril, Asistente de luces de largo alcance, Reconocimiento de señales de tráfico y Control de velocidad adaptativo.

Los acabados más altos (S2 y S3) añaden Detección de ángulo muerto y Alerta de tráfico trasero, lo que aumenta la seguridad en maniobras de cambio de carril y al salir de estacionamientos. En comparación, el Hyundai Kona y el Skoda Kamiq ofrecen una dotación de seguridad similar, pero algunos rivales, como el Mazda CX-30, tienen una conducción semi-autónoma más avanzada.

El Suzuki S-Cross es una buena opción en el segmento de los SUV compactos, con una excelente relación calidad-precio y un generoso equipamiento de serie. Lo recomendamos para aquellos que buscan un SUV compacto, amplio, práctico y económico, con tracción en las cuatro ruedas opcional y buen consumo de combustible. Sin embargo, si el refinamiento y la tecnología de última generación son prioridades, modelos como el Mazda CX-30 o el Ford Puma pueden ser mejores opciones.