Precio y opinión del Renault Rafale

El Renault Rafale es un coche de dimensiones generosas, con 4,71 metros de longitud y una carrocería de tipo SUV coupé. Está emparentado con el nuevo Espace, con el que comparte plataforma y motores, aunque este último tiene un enfoque más familiar y puede tener hasta siete plazas, mientras que el Rafale tiene cinco. Al igual que estos se producirá en la planta que la marca francesa tiene en Palencia.

Por ahora está disponible con un sistema híbrido no enchufable de 200 caballos de potencia y tracción delantera al que le corresponde el distintivo ECO de la DGT. Una virtud evidente de este motor es que tiene un consumo homologado particularmente bajo, mientras que sus prestaciones son normales para la potencia y el tamaño del coche. Más adelante va a llegar una versión híbrida enchufable con 300 caballos y tracción total que dispondrá del distintivo ambiental 0 Emisiones.

Los dos acabados disponibles se llaman techno y esprit Alpine. El equipamiento es abundante, con un sistema multimedia que funciona bajo el sistema operativo Android Automotive y dispone de dos pantallas de gran tamaño, acceso y arranque sin llave, tapicería de cuero y elementos de confort opcionales como asientos con calefacción y masaje y un techo panorámico denominado Solarbay que permite controlar la entrada de luz a demanda, entre otras cosas.

Aunque el Espace sea similar, Renault ha querido diferenciar al Rafale con una puesta a punto diferente, más deportiva, que permita disfrutar en mayor medida de una conducción rápida. Esos cambios afectan a muchos elementos de la suspensión y la dirección, que le dan al coche un tacto más preciso. El Rafale con acabado esprit Alpine tiene un sistema de dirección en el eje trasero que ayuda a mejorar la maniobrabilidad cuando se circula despacio y la estabilidad cuando se va deprisa.

El Rafale compite en el segmento de los SUV Coupé de grandes dimensiones, como el BMW X4 o el Peugeot 408. Si nos centramos en su sistema de propulsión híbrido, algunas alternativas similares son el Ford Kuga FHEV y el Toyota RAV4 Hybrid, por ejemplo. De entre todos los modelos mencionados, solo el BMW es más caro, por lo que el Renault no es demasiado asequible.

Por ahora, el único sistema de propulsión disponible es un híbrido no enchufable de 200 caballos que encontramos en otros modelos, como el Austral y el Espace. En él intervienen un motor de gasolina y dos eléctricos. El de gasolina tiene tres cilindros y 131 caballos, mientras que los eléctricos tienen 68 y 34 caballos, respectivamente. La batería es de iones de litio y tiene 1,7 kWh de capacidad, y la tracción es delantera.

El funcionamiento de este sistema híbrido es peculiar. A modo de resumen, el coche siempre inicia la marcha movido por el motor eléctrico más potente, el de 68 caballos, que puede llegar a impulsar por sí mismo el vehículo hasta 80 km/h, aunque por poco tiempo. El segundo motor eléctrico sirve para arrancar el motor de combustión y para recargar la batería. La transmisión es bastante compleja y permite que el motor de combustión pueda tanto engranarse directamente a las ruedas cuando el coche ya lleva cierta velocidad, como proveer de energía al motor eléctrico pequeño para que cargue la batería del sistema.

Más adelante, a mediados de 2024, llegará una versión híbrida enchufable con 300 caballos de potencia y tracción total. Desconocemos por ahora la autonomía eléctrica de que dispondrá.

Consumo y emisiones

Renault ha conseguido un consumo homologado bajísimo para el Rafale híbrido no enchufable, de solo 4,7 l/100 km. La mayoría de sus rivales, muchos de ellos menos potentes, gastan en torno a 1 litro más. El Ford Kuga FHEV de 179 caballos es el que más se le acerca, con 5,3 l/100 km.

Prestaciones

Las prestaciones están dentro de lo esperable para un SUV de este tamaño con 200 caballos. Acelera de 0 a 100 km/h en 8,9 segundos, que es suficiente para moverte muy bien en todos los entornos y sentir que llevas un coche ágil entre manos. El Ford recién mencionado realiza la misma maniobra en 9,1 segundos, por ejemplo.

La velocidad máxima es de 180 km/h, inferior a la del Kuga, aunque coincidirás con nosotros en que es más que suficiente.

Ayudas a la conducción

Desde el acabado techno tenemos elementos de ayuda a la conducción como la alerta por cambio involuntario de carril, alerta de fatiga del conductor, un asistente para mantener la distancia de seguridad, un asistente para la parada de emergencia, reconocimiento de señales de tráfico, control de crucero adaptativo, cámara trasera de ayuda al aparcamiento y faros de led también adaptativos.

Opcionalmente, también hay un sistema de detección de vehículos trasero, un sistema de cámaras para la visión periférica, aparcamiento asistido, un asistente para conducción en atascos y un sistema de conducción semi autónoma que combina el uso del programador de velocidad adaptativo con el sistema de centrado en el carril.

El Rafale puede ser una opción si buscas un SUV grande de estilo coupé con etiqueta ECO, un aspecto moderno y equipamiento de vanguardia. El sistema de propulsión gasta poco y mueve bien el coche, y la puesta a punto deportiva debería de ser atractiva para quien guste de un tacto de conducción un poquito especial. Ahora bien, en cierto modo es una compra pasional, pues hay coches parecidos que resultan más prácticos y ofrecen unas prestaciones similares por un precio más asequible.