La duda que todos tenemos al volante: ¿a qué velocidad adelanto a un coche de la Guardia Civil?

24 de diciembre de 2025 de

Disfruta el cambio de coche

La forma más fácil de cambiar tu coche online, totalmente gratis.
Valoración 4,4/5 de 5.844 opiniones

Con millones de desplazamientos en vacaciones y más controles en carretera, un guardia civil aclara cómo adelantar a una patrulla sin riesgos ni sanciones.

Con la llegada de las vacaciones, millones de desplazamientos por carretera llenan autovías y autopistas en toda España. Operaciones salida y retorno, viajes largos en familia y escapadas de fin de semana hacen que, durante estos meses, se refuercen los controles y la presencia de la Guardia Civil de Tráfico en las carreteras.

En ese contexto, muchos conductores se hacen la misma pregunta: ¿a qué velocidad se puede adelantar a un coche de la Guardia Civil sin problemas? No es raro encontrarse una patrulla circulando a 120 km/h y dudar si adelantarla, hacerlo muy despacio o incluso quedarse detrás por miedo a una multa. Un guardia civil nos ha explicado cómo se vive esta situación desde dentro del coche patrulla.

Encuentra tu coche nuevo

No hay una velocidad fija: manda la situación del tráfico

Según explicó el agente eb una entrevista con nuestro compañero Juan Francisco Calero, no existe una norma concreta sobre a cuántos kilómetros por hora se debe adelantar a la Guardia Civil. Todo depende del momento y del estado de la circulación. En operaciones salida o retorno, cuando se forman largas colas, la prioridad es clara: dar fluidez al tráfico.

En esas situaciones, los propios agentes pueden aumentar su velocidad para animar a los conductores a adelantar y evitar atascos innecesarios. “Ves que la gente no pasa, miras por el retrovisor y dices: madre mía, vaya cola… y empiezas el caramelo: venga, pasa, pero es que no pasa”, explica el agente. Incluso reconoce que, en ocasiones, cuando suben el ritmo para facilitar la circulación, ocurre algo curioso: “Ahora que me tienen que adelantar, no me adelantan”, concluye.

¿Qué pasa si adelantas muy justo?

En condiciones normales, cuando la patrulla circula a la velocidad máxima permitida y un conductor la adelanta solo un poco más rápido, el agente admite que puede interpretarse como una situación delicada. No por el adelantamiento en sí, sino porque puede ser el inicio de una escalada de velocidad.

Los mejores SUV

En esos casos, el coche de la Guardia Civil puede volver a adelantar al conductor como una advertencia preventiva, sin necesidad de sancionar. “Es como una advertencia de decir: no te animes, porque en cuanto me pases a mí ya no van a ser 130, ya van a ser 140 o 150”. La intención, explica, es evitar que el conductor siga acelerando una vez se ha quitado “la presión” del coche oficial.

Nervios al volante y miradas malinterpretadas

El agente también señala que muchos conductores se ponen especialmente tensos al adelantar a una patrulla. Cuando los guardias miran al interior del coche, muchos piensan que están buscando cualquier excusa para multar, pero no siempre es así. “La gente se pensará que es que lo miras a la cara… y no, lo que miras es el cinturón”.

Adelantar con seguridad y dentro de la ley

Entonces, ¿a cuánto hay que adelantar a la Guardia Civil? A la velocidad legal, realizando una maniobra clara y segura, sin eternizar el adelantamiento ni superar los límites de la vía.

Porque, como recuerda el propio agente, más allá de anécdotas y situaciones curiosas, el objetivo de la Guardia Civil es facilitar la movilidad y garantizar la seguridad, especialmente en momentos de gran volumen de tráfico. Y eso solo se consigue si todos circulamos respetando las normas y las velocidades máximas, haya o no un coche patrulla delante.


Sigue a Carwow y no te pierdas nada

Noticias y vídeos en tu móvil: Únete a nuestro canal de WhatsApp.

Al suscribirte aceptas los Términos y la Privacidad. Baja en un clic.