Las 5 diferencias entre un SUV y un crossover

¿Qué tipo de coche es un crossover? Esta es una pregunta muy frecuente entre los potenciales nuevos clientes de automóviles y en este artículo vamos a tratar de resolverla. A medida que el mercado se amplía, los fabricantes abordan nuevas clases de vehículo con el propósito de acercarse a un mayor número de consumidores. Dada la proliferación de los SUV, no son pocas las marcas que han desarrollado modelos alrededor de este concepto, el cual ofrece un puesto de conducción más alto y un coche con una estética que transmite mayor presencia o robustez. A continuación, te indicamos las cinco principales diferencias entre un SUV y un crossover.

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Carrocería: distintas proporciones

La carrocería de un crossover es menos voluminosa que la de un SUV. En esencia, un crossover es un turismo sobreelevado, motivo por el que su aspecto está a mitad camino entre un SUV y un coche tradicional. Es menos “corpulento” y presenta pasos de rueda más pequeños. La altura del conjunto autoportante es considerablemente inferior.

Distancia al suelo: un 25% menor

La menor altura general de un crossover no sólo está determinada por las dimensiones de su carrocería, sino por la distancia que existe entre esta y el suelo. Tal medida es más escasa que en un SUV. Generalmente, los crossover dejan un espacio entre la parte más baja del chasis y la superficie de unos 15 cm, que en los SUV suelen ser 20 cm.

Chasis: parecido al de un turismo

Así como un SUV es un automóvil diseñado desde cero como tal y con el objetivo de aportar más habitabilidad y posibilidades conducción, un crossover está creado sobre la base de un turismo convencional y del cual deriva mediante algunas modificaciones técnicas. Un SUV dispone de una plataforma alzada y suspensiones con mayor recorrido.

Neumáticos: nada de especial

Los SUV están equipados, por norma general, con neumáticos específicos de un perfil más alto o de un mayor diámetro que el de los crossover, los cuales emplean ruedas de turismo. Esto, en combinación de las diferencias anteriormente mencionadas, permite a los SUV contar con más capacidades todoterreno o, al menos, fuera del asfalto.

Precio: relativamente más baratos

Al implicar un desarrollo industrial más liviano, los crossover son más económicos que los SUV y, además, suelen pertenecer a segmentos o categorías inferiores, aunque hay excepciones. Como ejemplo, un Volkswagen Taigo (que deriva del Volkswagen Polo), cuesta 24.690 euros, mientras que un Volkswagen T-Roc vale 28.820 euros.

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