Renegade 4xe vs Compass 4xe. ¿Qué Jeep híbrido enchufable me compro?

Hemos probado durante una semana los dos modelos más populares de Jeep, el Renegade y el Compass (que comparte plataforma con el Alfa Romeo Tonale), en sus versiones híbridas enchufables (PHEV) de 239 caballos. El Renegade 4xe parte de 42.825 euros y el Compass 4xe, que es un poco más grande y lujoso, de 50.050 euros. Hay una versión híbrida enchufable del Compass con 190 caballos que es más barata, desde 46.900 €.

Para comparar los detalles generales de ambos modelos como la amplitud o las dimensiones, te animamos a que leas esta otra comparativa de la gama general, y que complementes este artículo con la prueba de cada modelo (Jeep Compass 4xe y Jeep Renegade 4xe).

Tras conducirlos en diferentes situaciones cotidianas y realizar los mismos viajes por autovía al mismo ritmo, hemos sacado algunas conclusiones que valen para ambos coches: son agradables en uso 100 % eléctrico y se pueden usar a diario por ciudad sin gastar gasolina, pero fuera de ese ámbito, cuando se agota la batería, tienen una autonomía total escasa y consumen mucha gasolina.

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El Compass es un SUV algo más refinado de suspensión y de interior, y se beneficia de que, al ser más moderno, puede tener cierto equipamiento actualizado como un sistema multimedia más avanzado o ayudas a la conducción adicionales. En ambos modelos te vas a encontrar algunos detalles de esos que tocan las narices en el día a día, como el funcionamiento de los asistentes, la ubicación de algunos mandos, el funcionamiento del acelerador o la dureza de la suspensión. También hay detalles buenos, como la visibilidad o la gran amplitud en caso de que seas de gran estatura, sobre todo si optas por el Renegade.

Conducción

En los dos Jeep híbridos enchufables, Renegade PHEV y Compass PHEV, como en otros coches de este tipo, el conductor puede elegir tres modos de conducción: Hybrid, Electric y e-Save. El primero es el modo normal de arranque, en el que el sistema gestiona por sí solo el funcionamiento de los motores según sea la necesidad. Salvo que pises el acelerador mucho, lo normal es que arranque en modo eléctrico y el coche se mueva así mientras la velocidad sea baja.

En el modo Electric se fuerza al sistema a no encender el motor de gasolina. Eso implica que la batería debe tener carga, y cuando esta se agote, irremediablemente usará el motor térmico. Tanto en el Renegade 4xe como en el Compass 4xe se puede circular en modo eléctrico hasta a 130 km/h.

Aunque ambos modelos tienen el mismo sistema de propulsión, formado por un motor de gasolina 1.3 y dos motores eléctricos (uno para mover las ruedas traseras y otro para cargar la batería en retención), hay diferencias dinámicas entre los dos. No tanto por cómo funciona su motor, que es similar, sino por la dirección y la suspensión.

El Compass es más confortable. La suspensión filtra mejor los baches, especialmente en autovía, donde el Renegade a veces llega a hacerse incómodo porque tiene una amortiguación más firme que hace que las irregularidades se noten en forma de pequeñas sacudidas constantes. Si el asfalto no está perfecto, en el Renegade irás “pegando saltitos”.

La dirección también es mejor en el Compass, aunque en ninguno de los dos coches es brillante. Más bien al contrario. En ambos tiene mucha asistencia y son imprecisas al ir rápido, por lo que es habitual ir haciendo correcciones en autovía. Si además va conectado el sistema de mantenimiento de carril, te irás peleando con él porque se empeña en mover el volante de manera muy sensible.

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Jeep no ha logrado ajustar las ayudas a la conducción de forma satisfactoria. Son demasiado sensibles y, a ratos, molestas. El sistema de frenada de emergencia tiende a sobresaltarte a veces de forma innecesaria, con ruidos y señales, antes de activar los frenos, sólo porque considera que te has acercado demasiado rápido al coche de delante. Aunque en realidad sea simplemente una retención que te hace frenar. Y esto es algo común a ambos modelos.

Consumo

El Jeep Renegade 4xe gasta más que el Compass 4xe en cualquier situación. Pese a que los dos modelos tienen la misma batería, de 11,4 kWh, y el mismo depósito de gasolina, de 36,5 litros, en el Compass cunde algo más.

Ninguno de los dos modelos tiene buena autonomía total. En el mejor de los casos, suponiendo que no agotas la reserva de combustible y que consigues un consumo medio en autovía de unos 8,5 l/100 km (lo que implica conducir suave y a ritmo legal todo el rato), conseguirás unos 380 o 400 kilómetros de alcance total en el Compass, de los cuales unos 350 serán con gasolina y entre 30 y 40 en modo eléctrico.

En el Renegade las cuentas son peores, porque en autovía nos hemos encontrado consumos más altos, en torno a 9 o 9,5 l/100 km de gasolina y similar en modo eléctrico. Si logras superar los 350 km de autonomía total, es que lo has conducido con mucha suavidad.

En ciudad es posible que logres superar los 40 km de autonomía eléctrica, pero tienes que proponértelo. Es decir, no superar unos 90 km/h en llano, aprovechar mucho la inercia en cuanto tengas ocasión y frenar siempre que puedas usando la regeneración eléctrica. Tienes dos niveles de retención, el normal y uno más potente que se activa pulsando una tecla en el salpicadero.

De esta forma, puedes conseguir un consumo eléctrico tanto con el Renegade 4xe como con el Compass 4xe en torno a 25 kWh/100 km, que es un consumo elevado. El hecho de que sea muy parecido entre ambos modelos se debe a que la aerodinámica tiene poca influencia a baja velocidad. El Renegade gasta más en autovía que el Compass porque su aerodinámica es peor.

Recarga eléctrica

Los dos modelos PHEV de Jeep admiten la misma potencia máxima de carga en corriente alterna, 7,4 kW. A ese nivel, que es habitual en supermercados y lugares públicos pero no en enchufes domésticos, necesitarás una hora y tres cuartos aproximadamente para cargar del 0 al 100 % la batería. Una potencia más común es 3,2 kW, usando el cargador para enchufe Schuko que trae en el maletero (además de un cable para toma de corriente Tipo 2 o Mennekes), en cuyo caso tarda unas tres horas y media. A 2,3 kW necesitarás 5 horas para tener la batería llena.

Como el horario de carga se puede programar desde el sistema multimedia de ambos Jeep, puedes aprovechar el horario de tarifa valle que tengas contratado. En tal caso, suponiendo que recargases los 11,4 kWh reales (son menos los útiles, pero la carga siempre tiene pérdidas y lo que se paga es lo suministrado por la red, no lo que el coche emplea, que es un poco menos) a un precio de 0,10 euros el kWh, la carga diaria del 100 % te saldría por 1,14 euros y mensualmente pagarías unos 34,20 euros, siempre que te movieses en torno a esos 40 km máximos de alcance útil.

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